EN LAS OLAS DEL MAR

En las olas del mar, turbulento me hallé, esperanza ninguna podía tener, y un día Cristo al mirarme perecer, me dio Su Mano de Poder y mi salvo.

Es por eso que canto a mi Dios, con todo el corazón, por el Grande Perdón que en Su Hijo me dio, que viniendo del cielo Muriera en la cruz mi Jesús, para darnos así más de Su Amor.

Un día Cristo al mirarme perecer, me dio Su Mano de Poder y mi salvó, oh, amigo, que buscas ansioso la paz, ven a Cristo Jesús y en Él hallarás, no hay otro Nombre a quien puedas tu mirar, solo en Jesús el Hijo de Dios la encontrarás.

Es por eso que canto a mi Dios, con todo el corazón, por el Grande Perdón que en Su Hijo me dio, que viniendo del cielo Muriera en la cruz mi Jesús, para darnos así más de Su Amor, para darnos así más de Su Amor, para darnos así más de Su Amor, para darnos así más de Su Amor.