OH, ALMA TRISTE

Mi alma triste y confundida andaba en busca de la paz, sin consuelo y sin descanso, qué vida amarga y falaz, qué vida amarga y falaz.

En mi hogar me enseñaban de aquel Calvario y una cruz, la pusieron en los hombros, que la llevara mi Jesús, que la llevara mi Jesús.

Los desprecios Él sufría, sin ofensa, los llevó, acusado, condenado, y esto todo lo aguantó, y esto todo lo aguantó.

Una corona de espinas, allí pusieron sobre Él, nadie quiso defenderle, Murió en esa cruz tan cruel, Murió en esa cruz tan cruel.

Oh, alma triste y confundida, nuestro Jesús por ti Murió, no lo dejes tú ahora, acuérdate lo que Él Sufrió, acuérdate lo que Él Sufrió.

Si te entregas hoy a Cristo, sin reserva sírvele, Él te dice: Yo te espero, Amor y Gozo te daré, Amor y Gozo te daré.