Escuchar Reflexión 🎧
Algo que escucho, cuando suceden cosas malas o terribles, es ¿Por qué Dios permite esto?, o ¿Por qué permitió aquello?.
Muchas veces suceden cosas en nuestra vida, que no las podemos entender y mucho menos explicar: la muerte repentina, algún accidente, el asesinato de un ser amado, un bebé que muere antes de nacer o tantas violaciones que suceden y otro sin fin de cosas que salen en las noticias y siempre se viene la pregunta o el pensamiento: ¿Por qué Dios lo permitió?.
De hecho, muchas veces lo hemos tomado como una verdad absoluta, tirando 100% la responsabilidad a Dios, cada vez que decimos: Bueno ni modo, ¡Dios así lo quiso o así lo permitió!.
Déjeme decirle que ese pensamiento o dicho, lo venimos transmitiendo de generación en generación. Pero realmente no, nos damos cuenta de que la mayoría de cosas que suceden en este mundo, es porque hemos decidido vivir nuestras vidas sin Dios.
Una cosa es la soberanía de Dios, en las cosas que Él hace, como por ejemplo: prefijar el orden de los tiempos, y los límites de nuestra habitación como dice Hechos 17:26, y otra cosa muy diferente, es todo lo que los humanos hacemos debajo del sol y las consecuencias que esto trae. Por eso antes de que usted siga pensando de la misma manera, le invito, a que lea lo que dice la Biblia en proverbios, 19 versículo 3: La insensatez del hombre tuerce su camino y luego contra Jehová se irrita su corazón.
O sea, es nuestra insensatez, la que ha provocado todo el caos en este mundo y aun así, le echamos la culpa a Dios, insinuando que es “Dios el que lo permitió” Cuando en realidad, es el humano, el que no quiere que Dios gobierne su vida. (Tal como sucedió con el pueblo de Israel, en el tiempo de los Jueces, que fue una de las etapas más oscuras de su historia, donde sucedieron hechos muy abominables, porque decidieron vivir sin Dios y cada uno hacía lo que bien le parecía)
Todos quiere vivir a su manera. Pero a nadie le gusta aceptar las consecuencias. Imagínese que usted es un padre de familia, que tiene un hijo y no lo quiere instruir en el camino del Señor, sino que permite que sea la televisión la que se lo eduque con violencia, mañas o cosas que no le agradan a Dios y resulta que el día de mañana, ese hijo anda en malos pasos, hasta el punto que llega a violar a una mujer. Las personas que no conozcan la historia de su hijo, dirán ¿Por qué Dios permitió eso?, cuando en realidad, fue producto de la insensatez de dos personas (El padre y su hijo)
Sé que hay muchos casos, en donde personas, han sido víctimas de la insensatez de otras personas. Pero es una realidad que vivimos en un mundo caído que está lleno de enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, envidias, homicidios, borracheras, violaciones y otras cosas terribles. Por eso el creyente, no debe de esperar que este mundo sea perfecto o que no sucedan cosas malas, cuando detrás de toda la maldad de los humanos, está satanás, que nos quiere robar, matar y destruir. Pero le quiero recordar lo que Cristo le dijo a sus discípulos en Juan 16:33 Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.
Por eso le invito hermano, que no ponga la mirada en las injusticias de este mundo caído y que pongamos la mirada en el reino venidero, donde el tabernáculo de Dios estará con los hombres y Él morará con nosotros y nosotros seremos su pueblo. Él enjugará toda lágrima de nuestros ojos y ahí ya no habrá muerte ni más llanto ni clamor ni dolor porque las primeras cosas pasaron.
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