El que habita al Abrigo del Altísimo, morará bajo las sombras del Omnipotente, diré yo a Jehová: Esperanza mía, Castillo mío, mi Dios en Él confiaré.
Y te librará del lazo del cazador, de la peste destruidora, con Sus Plumas te cubrirá y debajo de Sus Alas, seguro estarás.
No tendrás temor de espantos nocturnos, ni de saeta que vuele de día, ni de pestilencia que ande en oscuridad, ni de mortandad que en medio del día destruya. Caerán a tu lado mil y diez mil a tu diestra, más a ti no llegará, dice el Señor, más a ti, no llegará, dice el Señor.
Todo este material es totalmente sin ánimo de lucro y ha sido publicado solo para la edificación del pueblo de Dios. Es por tanto para uso personal (No comercial).